Seguir hacia el frente. Sólo echádonos hacia atrás para coger impulso.

Ha sido un placer compartir con vosotros estos casicincomeses de metáforas circenses. Es hora de que cada una siga su camino. Gracias por estar al otro lado.

Recuerdo cómo poníamos aquel filtro de agujeros estrellados en la ventana y dejábamos pasar la luz cuando queríamos verlas reflejadas en el techo. Como una de esas lámparas de bebés que proyectan figuras en las paredes.

Las luces, la calma, tú.

Somos como la seguridad vial, ¿no? Primero un stop y luego un ceda el paso.